Las parafilias sexuales más extrañas

Blog, ,

Las parafilias no son cosa del otro mundo, tal vez tengas la ligera sospecha de algunas, pero serán las más conocidas y si quieres, hasta las más comunes. Primero, a manera de aclaración y para que no surjan dudas al respecto aquí te tengo lo que es una parafilia y su origen.

Una parafilia (del griego παρά, para, «al margen de», y φιλία, filía, «amor»), desviación sexual o perversión, es un patrón de comportamiento en el cual el placer no se encuentra en la cópula, sino en alguna otra actividad. Las parafilias se consideran “inocentes”, salvo cuando están dirigidas a un objeto potencialmente peligroso -dañino para el sujeto o para otros- o cuando impiden el funcionamiento sexual normal.

En esta ocasión, aquí estoy para compartirte algunas de las que me encontré y nunca había imaginado que existieran.  No escribo estas palabras con la finalidad morbosa, simplemente digamos que es por cultura general y por si en algún momento escuchas una de estas raras palabras por ahí, no te quedes con la duda y sepas de lo que te hablan. No vaya a ser que  te encuentres ante uno de estos extraños casos y aceptes sin saber lo que realmente te espera…

Bueno, pues empecemos con nuestra extraña lista de parafilias:

Amaurofilia:
Atracción por las parejas ciegas o con los ojos vendados.

Abasiofilia:
Es una rara excitación o perversión porque la pareja sea coja.

Amelotasis:
Inclinación sexual hacia personas con ausencia de algún miembro.

Anastimafilia:
Interés sexual por personas con sobrepeso. 

Anofelorastia:
Excitación al profanar objetos considerados sagrados.

Antolagnia:
Gran estimulación sexual por oler las flores.

Apotemnofilia:
Perversión sexual por la idea de ser amputado. 

Autoasfixiofilia:
Excitación por ser asfixiado durante el acto sexual.

Autonepiofilia:
Atracción por utilizar pañales y ser tratado como un bebé en el acto sexual.

Canibalismo:
Excitación sexual al ingerir partes del cuerpo de otra persona. 

Flatofilia:
Estimulo sexual provocado por el olor de los gases intestinales propios o de la pareja.

Furtling:
Excitación al meter un dedo a través de un agujero cortado en la zona genital de una foto o dibujo.

Bukkake:
Perversión por recibir eyaculaciones encima, generalmente en la cara. 

Gregomulcia:
Atracción de ser manoseado por una persona desconocida en una multitud. 

Dendrofilia:
Sucede cuando la excitación sólo se produce al frotarse contra los árboles.

Picacismo:
Excitación sexual al introducir alimentos en alguna de las cavidades del cuerpo con el fin de que 
la pareja los recupere con la boca. 

Espectrofilia:
Se caracteriza por la búsqueda y necesidad de tener un encuentro sexual con seres de otro mundo y fantasmas.

Misofilia:
Estimulo sexual que es generado por la ropa sucia.  

Muy bien, ya conocemos estas rarísimas filias, pero hay infinidad, unas más interesantes que otras, y algunas que -desde mi punto de vista- se acercan más a la normalidad, si es que esta existe.  Pero no hay que espantarnos ni verlo como algo ajeno, ya que poseerlas no es sinónimo de maldad, pues –como dijimos antes- son consideradas inocuas cuando no dañan a terceros o son peligrosas.

Hay algunas de ellas que ni siquiera pasaban por mi pensamiento y al momento de investigar del tema fue totalmente sorprendente, y uno trata de imaginar eso, esa rareza de la cual algunas personas son fanáticas y se hace increíblemente extraño. Por ejemplo, es difícil pensar que existen la abasiofilia o la misofilia, que realmente me sonó raro, chistoso y -a su vez- absurdo, pues muchos tenemos ropita sucia en casa y no sabemos en qué momento algún invitado puede sentirse atraído o excitado por esta inofensiva ropa sucia; o qué pensar de la amelotasis que, sin duda, a mí me provocaría muchísimo dolor antes que placer y, bueno, entre muchas otras ya mencionadas, que te pueden causar un momento raro de reflexión.